Hemos agradecido al Divino Maestro por esta celebración: una eucaristía presidida por el Cardenal Luis José Rueda Aparicio, Arzobispo Primado de Bogotá, en nuestra capilla, acompañado por los Padres Paulinos y los miembros de la Familia Paulina, como también de bienhechores y colaboradores.
Las Pías Discípulas elevamos nuestra acción de gracias por lo vivido en alegrías, sufrimientos, luchas y retos en estos 100 años de presencia evangelizadora en la Iglesia.
En el marco de esta celebración del centenario también la novicia Yina Marcela Mota dijo su “Aquí estoy” al Divino Maestro con su profesión religiosa en nuestra congregación de Pías Discípulas del Divino Maestro.
Continuamos orando para que las jóvenes puedan discernir su vocación y su llamado para que con convicción sigan al Maestro Divino.
Todo lo vivido es para nosotras un acto muy especial que renueva nuestra Vocación y Misión en la Iglesia y para el mundo.
Un gracias Infinitas a quienes nos han acompañado en este caminar hacia la santidad y que, rogamos a Dios, continúen orando por las Pías Discípulas del Divino Maestro.
PIAS DISCIPULAS DEL DIVINO MAESTRO
“Encomendamos a nuestras hermanas Pías Discípulas del Divino Maestro en este jubileo suyo, para que sean “mujeres del Evangelio” en medio de su pueblo y savia vital para la misión de toda la Familia Paulina” (P. Doménico Sóliman, Superior general).
