Capítulo VI
ORGANIZACIÓN
Nosotros tenemos que dar una gran importancia a la organización. Si, hay que organizar el bien. Las organizaciones tienen una gran fuerza. Cada uno puede ser un santo, más por sí solo es una ramita. Pero si a la ramita se le unen muchas ramas entonces se convierte en una fuerza (PrPM 1960)
Art. 2-Recursos financieros y administración
§1 – La Asociación Cooperadores Paulinos no pretende adquirir, poseer, administrar y enajenar bienes temporales, aun teniendo la posibilidad para ello como persona jurídica eclesiástica publica a norma del derecho.
§2 – Gracias a su vínculo espiritual y carismático con la Familia Paulina, la Asociación tiene como referencia operativa los centros de apostolado y las comunidades de las Congregaciones de la Familia Paulina.
§3 – El hecho de tener como referencia operativa las casas y centros de apostolado paulinos no confiere a los Cooperadores el derecho de gestionar o administrar los bienes patrimoniales pertenecientes a las Congregaciones. Al Cooperador nada se le debe como remuneración por el servicio de carácter voluntario efectuado en las estructuras de las Congregaciones paulinas a título y en razón de su vínculo con la Asociación. Eventuales prestaciones profesionales a título privado/personal estarán reguladas de conformidad con la legislación civil local.
§4 – La sede central de la Asociación Cooperadores Paulinos estará en la Casa general de la Sociedad San Pablo en Roma, donde también se conservara el Archivo general de los Cooperadores paulinos.
§5 – A nivel nacional, la sede de referencia de la Asociación estará en una estructura de una de las Congregaciones de la Familia Paulina.
§6 – Para sufragar los gastos relacionados con la producción de materiales formativos, comunicaciones, viajes y realización de eventos, los distintos Consejos podrán organizar, según la necesidad, métodos lícitos y transparentes para la recaudación de fondos. Cada Cooperador paulino con sentido de corresponsabilidad y compartición, siéntase implicado y participe en dar un aporte para la autonomía económica de la Asociación que permita a esta cumplir plenamente su misión y apoyar iniciativas, evitando toda lógica de acumulación de bienes.