La Eucaristía fue presidida por el arzobispo de Panamá, Mons. José Domingo Ulloa Mendieta y se celebró con la afluencia permitida al templo, respetando todas las medidas sanitarias por parte de los asistentes.
El Padre Joardin Antonio Martínez Martínez, sacerdote de la Sociedad de San Pablo (sacerdotes y hermanos paulinos), de la parroquia de Nuestra Señora del Perpetuo Socorro, en la Vicaría de Santa Eduviges, corregimiento de Betania en la Arquidiócesis de Panamá, tomó posesión formalmente de su cargo la tarde del jueves 12 de agosto de 2021, de manos del Arzobispo de Panamá, Mons. José Domingo Ulloa, durante la misa celebrada en el templo, en el que el nuevo Párroco comenzará su labor pastoral, como Administrador.
La celebración litúrgica dio inicio como de costumbre, y omitiendo el acto penitencial, se procedió a la lectura del decreto de nombramiento, en el cual el padre Joardin es nombrado Administrador de la Parroquia.
El señor Arzobispo le hizo entrega de las llaves del templo, así como de los libros parroquiales, el confesionario, el Sagrario, la pila bautismal, la sede presbiteral y el Altar como centro donde el mismo Señor Jesucristo sigue haciéndose presente en medio de su pueblo.
El nuevo párroco, una vez proclamado su nombramiento, de rodillas ante el Arzobispo y ante la comunidad congregada, recitó la Profesión de Fe y el juramento de fidelidad para cumplir con sus obligaciones con la Iglesia, como depósito de la fe que transmitirá a los feligreses, observando las leyes eclesiásticas, con obediencia a los pastores y ayudando al señor Obispo.
Seguidamente, después de haber tomado posesión de manera litúrgica, se procedió con la firma del Acta: fue firmada en el altar por Mons. José Domingo y por el padre Joardin Antonio; recibiendo jurídicamente la administración parroquial y quedando al frente de la comunidad.
Tras la lectura del Evangelio, Mons. José Domingo, se dirigió a los feligreses, recordando el significado del ministerio del Párroco, expresando claramente cuáles eran las responsabilidades que se adquirían, como también las de la comunidad, enfatizando el concepto de la unidad y resaltando que en esa línea va encaminado el ministerio del Párroco, el cual debe estar en comunión con el Obispo, con la comunidad y con el Papa, así como también lo realiza el Obispo.
“Tenemos la confianza en él” fueron parte de las palabras con las que el Arzobispo, continuó y animó a la comunidad a hacer un caminar juntos, con cariño, con amor y con miras a aprovechar lo mejor del padre Joardin, para madurar en la fe y vivir como hermanos.
Monseñor también se dirigió con unas palabras al padre Joardin: “Se te encomienda esta comunidad de Nuestra Señora del Perpetuo Socorro, para que te entregues en esta parcela de la viña del Señor… El Señor te quiere, cavando, plantando, regando y podando lo que haya que podar en esta viña que hoy se te confía”. Y recordó que los signos apenas realizados, la entrega de las llaves, el sentarse en la sede, etc., solo quieren expresar la dedicación a este ministerio.
La homilía terminó con estas palabras: “Que este nuevo ministerio, dé todos los frutos pastorales de su tarea evangelizadora”. Asimismo, agradeció al Padre Joardin por su trabajo y su obediencia, señalando que el trabajo pastoral es siempre un motivo de alegría, al comenzar una nueva etapa en este ministerio como pastor, destacando siempre la importancia de la Unidad Pastoral, así como la buena convivencia que debe reinar entre los sacerdotes y los laicos. “La misión de la Sociedad de San Pablo en la Parroquia Nuestra Señora del Perpetuo Socorro es que cada laico se convierta en una Biblia viviente”, concluyó el Arzobispo.
