
El trabajo de la Familia Paulina en la Iglesia ha sido de gran aporte, con las labores apostólicas de muchos sacerdotes, religiosos, religiosas y laicos que han cooperado en la obra de evangelización.
El trabajo de la Familia Paulina en la Iglesia ha sido de gran aporte, con las labores apostólicas de muchos sacerdotes, religiosos, religiosas y laicos que han cooperado en la obra de evangelización.
Mujeres fieles a la voluntad de Dios, ejecutada a través del fundador el beato Santiago Alberione, a quien le entregaron todo su apoyo como compañeras de acción y fuerza en circunstancias difíciles.
«La Familia Paulina reproduce a la Iglesia en sus miembros, en sus actividades, en su apostolado, en su misión.
Los miembros de la Familia Paulina recibimos y vivimos el mes de agosto con inmensa alegría y gratitud, pues se trata del mes en el cual, cada año, celebramos el aniversario de nuestra existencia en el mundo y en la Iglesia, a partir de la fundación de la Sociedad de San Pablo, el 20 de agosto de 1914
Habiendo orientado su vida hacia el sacerdocio, es lógico que Santiago fuera muy sensible al pensamiento de las misiones, que observase con curiosidad a los primeros misioneros que pasaban por su parroquia, y que escuchase con gran atención los primeros sermones oídos acerca de las misiones, probablemente en la Epifanía de 1892.